Oleiros, 25 de enero de 2016-. El Concello de Oleiros será desde mañana el propietario de la gasolinera de Santa Cruz. El Concello iniciará ahora los trámites para cederle los terrenos a la Xunta de Galicia para que construya lo antes posible una rotonda. Además también está previsto la creación de una zona de estacionamiento para vehículos y una parada de autobús.
El primer Plan general de ordenación municipal aprobado en Oleiros destina el espacio que ocupa la gasolinera a fines viarios y no a una estación de servicio. El PXOM de 1984 establece la construcción de una rotonda para descongestionar el tráfico en la zona de Santa Cruz. Una actuación que afecta a todos los vecinos y vecinas del norte del municipio y a los numerosos visitantes que acuden a las playas. Segundo las mediciones oficiales, 22.469 vehículos circulan cada día por ese punto de la carretera.
El Concello de Oleiros decidió esperar hasta ahora para llevar a cabo la expropiación ya que se consideró que este era el mejor momento por la finalización del contrato de arrendamiento. La licencia de esta gasolinera es del año 1959. Se amplió en 1977 para instalar nuevos depósitos, pero el período de vida útil establecido por ley finalizaba hoy.
La revocación de la licencia de la gasolinera se debe, en primera instancia, a la vulneración de la legislación medioambiental sobre emisiones de gases y a la obsolescencia de las instalaciones. El Concello de Oleiros detectó en numerosas ocasiones fugas de partículas y de aceites que contaminan el río de Santa Cruz. Cabe recordar que esa acumulación de gases provocó, en 1986, una explosión a un local de hostelería próximo a las instalaciones de Cepsa.
La gasolinera también incumplía los horarios de apertura al cerrar los fines de semana y, en ocasiones, no disponía de combustible para suministrar los vehículos. Numerosos vecinos y vecinas se pusieron en contacto con el Concello de Oleiros para mostrar su malestar por el deficiente servicio que ofrecían a los conductores en esta estación. Segundo esos mismos vecinos y vecinas, los problemas se debían a los impagos a los proveedores del combustible. Los vecinos también informaron que desde la dirección intentaron solucionar esa situación induciendo a los trabajadores a solicitar préstamelos bancarios, bajo insinuaciones de un posible cierre de la gasolinera.
Los propietarios de la estación de servicio recibieron la primera notificación municipal en octubre de 2014, con más de un año de antelación. Tanto el titular, Cepsa, como el arrendatario, Distribuciones Taula, están completamente informados del proceso de expropiación desde entonces.