Son programas públicos de empleo-formación que tienen como finalidad la inserción laboral de los chicos y chicas, desempleados y menores de veinticinco años, mediante su cualificación profesional en ocupaciones o actividades de utilidad pública.
Pueden promoverlas los órganos, organismos autónomos y entes públicos de la Administración Genenral del Estado y de la Comunidad Autónoma; tambien, las entidades locales y sus organismos autónomos y las fundaciones, asociaciones y otras entidades sin ánimo de lucro.
Sus áreas de actuación estan vinculadas en especiales cos servicios de:
• Utilidad colectiva (rehabilitación del patrimonio histórico, artístico, cultural o natural; gestión de residuos y aguas, protección del medio ambiente, etc.)
• Ocio y culturales (promoción del turismo y desenvolvimiento local y cultural)
• Personalizados de carácter cotidiano (cuidado de los niños, prestación de servicios de ayuda a domicilio a personas discapacitadas o de la tercera edad, etc.)
Tanto en las Escuelas Taller como en las Casas de Oficios la formación se estructura en dos etapas:
- Siempre tiene una duración de seis meses y los alumnos y alumnas reciben formación profesional de carácter ocupacional.
- En las Escuelas Taller puede llegar hasta año y medio, mientras que en las Casas de Oficios es de seis meses, los alumnos y alumnas completan su formación con alternancia en el trabajo y la práctica profesional.
Los requisitos para poder participar en un proyecto de estos son:
- Ser menor de 25 años.
- Estar desempleado e inscrito en el Servicio Público de Empleo de Galicia.
- Preferentemente, no tener participado en otra Escuela Taller o Casa de Oficios.
Durante la etapa formativa los participantes tienen derecho a una beca por los días lectivos asistidos. En la segunda, al estar vinculados con la entidad promotora por un contrato de trabajo, perciben una retribución equivalente al 75 % del Salario Mínimo Interprofesional.
Tendrán preferencia para participar en estos proyectos las personas que, reuniendo los requisitos generales establecidos y, si es el caso, teniendo prevista la realización de este tipo de medidas en su itinerario de inserción profesional, tengan especiales dificultades de inserción en el mercado de trabajo, tales como: las mujeres en general, las mujeres victimas de violencia, los trabajadores/as que agotaran las prestaciones y subsidios por desempleo, las personas paradas de larga duración, las personas con discapacidad, siempre que puedan realizar los trabajos y las personas pertenecientes a otros colectivos desfavorecidos o en riesgo de exclusión social, especialmente, beneficiarios/as de la renta de integración social de Galicia.
Las entidades promotoras, además de la formación profesional, proporcionan a los alumnos y alumnas formación empresarial y conocimientos básicos en seguridad y salud en el trabajo, orientación laboral y asesoramiento sobre salidas profesionales.
Así mismo, a los alumnos y alumnas que no tienen terminada la educación obligatoria, se les ofrece la oportunidad de completarla mediante clases específicas.